miércoles, 21 de enero de 2015

Autorretrato ¿Alegoría o reflexión puramente literaria?



¿Quién soy yo?


Compendio de experiencias ilusorias, realidades fragmentadas y personalidades adquiridas que través de lo que el humano ha creado y nombrado “tiempo”, aproximadamente “un par” de  años, los cuales no interesan mencionar ahorita, se transfiguran escondidas en la realidad sensible que percibes primariamente. Perdido en este mundo, encontré a tiempo mi vocación humanista e  interesado en temáticas sobre el diseño y creación de moda (indumentaria de alta costura) y cultura “drag queen”, termine inmerso en el mundo de la historia/teoría del arte que abrió mi visión y dirigió mis intereses a cuestiones de filosofía y antropología. Amante de las “bellas artes” y descubridor en proceso del –arte- me considero un ARTISTA: poeta de la pintura, escultor de la danza, arquitecto de la literatura y actor de la música, con lo cual deseo alcanzar el plano espiritual de la realidad suprasensible.  De todos los aspectos formales del “arte”, mi pasión son los colores, a los cuales le sumo la extravagancia como accidente favorito. Rupaul, uno de los seres humanos más increíbles de esta época e ídolo personal mío dice: “You all born naked and the rest is drag (Todos nacen desnudos, el resto es “drag”). Soy un “drag queen” (metafóricamente), pues “drag” se trata de hacer todo lo que tu quieras: todos somos seres espirituales, desnudos y preparados para entrar a escena, una escena de la obra de teatro llamada "VIDA". Con mi  drag, yo defino exactamente que rol, que papel quiero jugar en esta obra, en esta escena, y una vez que lo decido me "transformo" y entró en papel; luego hay que recordar que esta obra teatral esta hecha de multiples escenas (realidades), en las cuales actuamos de manera diferente, nos vestimos para la ocasión diría yo, como los "drags",  yo me transformo en lo que quiero pues soy una esencia, un ser espiritual viviendo experiencias humanas, todo lo que ves de mí es solo un "personaje". Pero regresando a cuestiones de orden fundamental que aquejan mi atención, fijo y establezco mi postura sobre la importancia que tienen las “Humanidades”, su análisis y su estudio, para el entendimiento del ser humano, que bien podría ser respuesta de muchos problemas de los ámbitos del sistema cultural. Soy de mente abierta. Para mí no existe lo “normal” o lo “extraño”, solo existe lo que está ahí (¿Ahí dónde?)… pero que banal es decir que solo existe lo que –está ahí- cuando ni siquiera sabemos que es lo que existe. Existe el arte (el discurso), existo yo, existes tú, existe el espacio temporal en el que vives pero a la vez no. En el tiempo, el futuro es una bella ilusión, motor de nuestras más grandes locuras pero que es una falsedad. El presente vive y muere a cada instante, es la parte del tiempo que agoniza y revive en un ciclo infinito. Mientras lees esto, mientras tus ojos avanzan cada vez más, te darás cuenta de que el “tiempo” avanza, el reloj nunca se detiene, nada volverá a ser lo mismo de hace una hora, un minuto, un segundo y aun así sigues avanzando por la vida, por este texto, anhelando momentos vividos que nunca volverán… o tal vez no. El pasado es lo único seguro. Lo que ya fue, ya pasó, ya no existe nunca más… “Nadie se baña en dos veces en el mismo rió” decía Heráclito, luego Parménides nos dice “Lo que es, es”… en fin. Estudio el pasado, estudio historia… del arte.  Todo es pasado, es lo que queda… pero tal vez, como dije al principio, eso que el hombre invento llamado “tiempo”, solo sea eso… una invención, una de sus tantas invenciones que al final de todo sirven para controlar la vida. Ahí está mi interés, en las cosas que nos controlan, en las palabras, conceptos, invenciones que nos controlan y la forma de salir de ello… que en mi caso encontré (o al menos pensé en encontrar) en el “arte”, de lo cual aprendí que no hay escapatoria, somos seres extraños, complicados e intensos (en mi caso más, nada más basta mirar todo la “biblia” que escrito). Me fascina escribir, como “habéis” podido percatar.  Más que escritor, me considero pensador… triste realidad, puesto que en la mayoría de las veces al llegar al papel desaparecen mis ideas… ¿Ellas me controlan o yo las controlo a ellas?... Como artista ¿controlo a mi arte o el arte me controla a mí?, como pensador ¿Mis ideas controlan el mundo o el mundo controla mis ideas?... al parecer no sé nada. Esta es mi realidad, complicada, intensa y no necesariamente interesante

¿Cuál es la tuya?



-Alejandro Iván Flores Chávez-


 "Keep your eyes on the stars... You'll never be one"
 -Raven-